1- Poner una sartén amplia al fuego, calentarla y añadir el mijo, calentarlo sin dejar de remover y añadir el agua, dejar cocer hasta que esté blando (seguir las indicaciones del envase con respecto al agua y tiempo de cocción).
2- Pelar las zanahorias y cortar en tiras finas, cubrir de agua y cocer hasta que estén al dente, escurrir y reservar. Pelar el pepino y cortar en tiras, lavar los rabanitos y cortar en tiras también, reservar. Escurrir el aceite de la ventresca y separarla en lascas.
3- Mezclar el vinagre con el azúcar y la pizca de sal. Ir añadiéndolo al mijo cucharada a cucharada a la vez que lo removemos para enfriarlo, podéis ayudaros de un abanico o paipai.
4- Colocar una lámina de alga nori sobre una esterilla de bambú, repartir sobre ella una cuarta parte del mijo dejando libre medio cm. del lateral de abajo (para que al enrollarlo se pegue bien).
5- Poner hacia la mitad de la capa de mijo, unas tiras de zanahorias un poco de pepino, rabanitos y la cuarta parte de la ventresca, enrollar con ayuda de la esterilla, presionar el rollo ligeramente y cortar, servir con salsa de soja.