1- Poner la harina en un bol amplio e incorporar la sal. Si se utiliza levadura fresca, la disolvemos en el agua ligeramente templada. Si de lo que disponemos es de levadura seca, la mezclamos con la harina y la sal.
2- Hacer un hueco en la harina y añadir el agua a la vez que se mezcla. Se recomienda hacer esto con una sola mano. Cuando está bien mezclado se comienza a amasar con las dos manos durante aproximadamente 10 minutos, hasta que la masa se despegue de las manos. Este amasado puede hacerse sobre una base lisa espolvoreada de harina.
3- Dejamos reposar la masa de 15 a 20 minutos y tapada con un paño. Pasado este tiempo, amasamos de nuevo y le damos la forma que deseemos, torta, molde, barras o panecillos.
4- Precalentamos el horno a 220º. Dejamos reposar la masa hasta que doble su volumen y horneamos según sea el tamaño de las piezas de 15 a 35 minutos.
5- En esta ocasión hemos preparado panecillos con sorpresa, al darle forma les hemos puesto sésamo, semillas de amapola, pimienta y eneldo seco. Los servimos acompañados de aceite de oliva virgen extra con mejorana fresca.